15 junio 2006

La memoria de los peces

En el año 98 vivía en Sevilla con Oliver. Él era francés y ese año se jugaba en su país el Mundial de Fútbol. Incluso nos trajo una camiseta a Pipe y a mí. ¿Recordáis el 6-1 de España a Bulgaria que no sirvió para nada?



Y que conste que yo, como otros, también me emocioné con el 4-0.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y YO A PUNTO DE PARIR.....

Anónimo dijo...

El puto Olivier, gracias a el tuve mi primera PlayStation, jojojojojojojojojo, lo que le gustaba vivir solo, que al final por lo visto se quedo solo en el piso.